Era el mes de Noviembre del año 2004...
En la facultad me estaba llendo muy bien y en mi vida personal también.
Estaba saliendo a andar en bici como loco casi todos los días a bordo de mi Vairo XR 4000 que había comprado hacía solamente un par de meses.
Un sábado (06/11/04) me llama mi super amiga Maira para invitarme a su cumpleaños que festejaba en su linda casa del barrio Villa Crespo y le dije que no podía asistir al mismo porque tenía un parcial en la semana para rendir. Ella insistió pero no fui.
Al día siguiente (domingo) hice un break mientras estudiaba y decidí salir a oxigenar mi cerebro llendo a andar en bicicleta y de paso tomar unas fotografías locas de la ciudad. Pasé por el puente Nicolás Avellaneda (puente que une la ciudad de Dock Sud e Isla Maciel con La Boca) y me detuve en el medio del mismo a sacar fotos. Estaba haciendo unas tomas increíbles del Riachuelo y el Río de La Plata.
Termino con mi cometido y cuando me doy vuelta veo cuatro (o cinco) siluetas de personas corriendo hacia mi. Una de ellas salta en el aire y de forma muy violenta me dá un palazo bárbaro sobre mi cabeza sin mediar palabra alguna. Caigo al suelo y luego comienzan a patearme entre todos (al mejor estilo "Buenos Muchachos") sobre todo mi cuerpo. Luego intentan agarrarme para tirarme del puente hacia el Riachuelo de mierda pero yo me agarré de una baranda y les frustré el plan. Siguen los golpes. Yo veía poco y nada ya que tenía mis ojos inundados de sangre roja. Me habían roto un vaso sanguíneo y mi pérdida del líquido vital era importante. Intenté dialogar con ellos en ese momento pero solo recibía más y más golpes. Les hablaba bien, con respeto pero no cesaba la furia. Luego me arrastraron por el puente para intentar quitarme mi mochila Timberland, modelo Xenon hasta que lo lograron. En total me robaron: mi bicileta, mi reloj Casio G-shock, mi Minidisc, mi billetera, efectivo, etc...- Esa tarde de domingo jugaba Boca vs. River y no había un alma en la calle. De repente aparece un poco de tráfico en el puente y los "pibes" que estaban refalopeados a pastillas (de venta legal en farmacias) y alcohol huyen como ratas hacia el lado de la Isla Maciel. Cierro mis ojos y luego los abro. Me levanto a puro control mental. Pienso. Resuelvo dirigirme al hospital más cercano porque mi cuerpo necesitaba una reparación de manera inmediata o la quedaba ahí mismo. Esa tarde la muerte estaba encima de mi y tuve que luchar contra ella. Camino hacia el lado de la capital, sabía que el Argerich quedaba a unos mil metros de distancia pero también sabía que por mis propios medios no iba a poder llegar. Intenté frenar un colectivo de la línea 159 pero casi me atropella, no me dió bola. Seguí caminando hasta que de repente veo un auto que frenó adelante mio (unos 70 metros aproximadamente) y metió marcha atras a full. Luego se detuvo a mi lado y el que manejaba me gritó: "...Subí loco! Mirá cómo estás! Te rompieron todo!..." (son palabras difíciles de olvidar). Subo y el auto sale quemando gomas. En cuestión de un minuto de reloj me encontraba pateando la puerta de "emergencias" del hospital Argerich. Cuando entro esucho que una persona grita: "...Quiróóófano!...". Me pincharon toda la cabeza, me dieron un par de puntos, me repararon, blablablablabla...
Han pasado poco más de tres años desde esa tarde celestial (infernal si prefieren). Recién hace un par de meses que me encuentro al 100%. Mi cabeza estuvo a media máquina casi tres años...
Pd: Gracias especiales a María Verónica Amadeo y a Gabriel Velardez que vinieron a mi llamado en forma casi instantánea. Y al resto de mis amigos que supieron bancarme a morir tanto tiempo. Ellos saben quienes son. No hace falta que les diga quiénes son!
Tampoco me quiero olvidar del desconocido que me auxilió con su auto. Sin su ayuda yo no estaría escribiendo estas palabras. Nunca supe su nombre. Su auto era un Fiat Duna color blanco. Ojalá algun día lo vea asi le doy las gracias.
Pd2: Maldita policía de mierda. En el hospital un "rati botón" de la P.F.A. me interroga acerca de lo sucedido. Le cuento la verdad y no me creyó. Su "supuesta" versión de los hechos era de que yo formaba parte de alguna bandita de barras bravas y que seguro yo me había hecho el loco con alguien y por eso me cagaron a palos...
Ese policía es un mal nacido inservible pero seguramente ahora debe estar patrullando nuestras calles "al servicio de la comunidad".